El cometa C/2023 A3 Tsuchinshan-ATLAS, apodado como “el cometa del siglo” por los científicos, entrará en su fase de mayor visibilidad este sábado 12 de octubre. Este fenómeno cósmico, que no volverá a ser visible por otros 80,000 años, ofrece una oportunidad única para los observadores del cielo.
Descubierto el año pasado en el observatorio Tsuchinshan-ATLAS en China, este cometa luminoso sobrevivió su reciente paso cerca del Sol, un evento que podría haberlo desintegrado debido a su composición helada. Sin embargo, el cometa se mantuvo intacto, y ahora se aproxima a su punto más cercano a la Tierra, a una distancia de 70 millones de kilómetros, según explicó el astrónomo Bill Cooke en un boletín de la NASA.
Cometa del siglo, visible desde Panamá
La Dirección Nacional de Ciencias Espaciales (OAP) de la Universidad Tecnológica de Panamá (UTP) informó que el cometa podrá observarse en el cielo panameño a partir del 12 de octubre, cerca de la constelación Leo, justo antes del amanecer en dirección este. Ya ha sido capturado en imágenes por telescopios locales, como el de Penonomé.
Desde finales de septiembre, su trayectoria ha sido visible desde el hemisferio sur, pero a partir de mediados de octubre se podrá apreciar también en el hemisferio norte, principalmente en cielos despejados durante el crepúsculo o al inicio de la noche, según reportes de la NASA.
Un espectáculo astronómico único
Robert Massey, director adjunto de la Real Sociedad Astronómica británica, ha destacado que los cometas brillantes son un fenómeno poco común, por lo que recomienda no perder la oportunidad de observarlo. "Aunque necesites binoculares para distinguir su cola, estos cometas son absolutamente hermosos", afirmó Massey a la BBC.
Este cometa, compuesto de hielo, roca y gas, se distingue de los asteroides por su característica cola brillante, formada cuando el calor del Sol transforma el hielo en gas y libera partículas de polvo atrapadas.
A pesar de que las expectativas sobre su brillo han disminuido desde su descubrimiento, el Tsuchinshan-ATLAS sigue siendo un espectáculo astronómico digno de contemplar, con fotógrafos de todo el mundo capturando impresionantes imágenes de su luminosidad con técnicas de exposición prolongada.